Mañana, en la batalla, no pienses en mi...

            Antes de continuar con las entradas, ahora que vuelvo a tener un poquito mas de tiempo ( y no quiero decirlo en voz muy alta porqué mi batalla con el tiempo viene de atrás y seguro que me hace una mala jugada ) quiero aclarar una cosa : aquí escribe Ororo Iqadi, no Mª José. Con esto no quiero decir que tenga desdoblamiento de personalidad ni nada parecido (y aquí mi buen amigo Fran, podría dar varios diagnósticos ) no, lo que pasa es que para mi este blog supone una via escapatoria como dije en la primera entrada, y el sentimento de libertad lo experimento de esa forma, esa es mi manera.  Aquí tengo via libre para decir y dejar de decir, para suponer, para entristecerme mientras sonrío en el trabajo o para alegrarme mientras en la vida real de pueblo de montaña me empequeñezco y quizás llore. Una entrada no tiene porqué ser el resumen de mi dia, de mi semana o de mi vida. La vida es mucho mas compleja que unas cuantas lineas que se escriben con prisa en una página de San Google ( con respeto ehhh ) y sip, escribo lo que quiero ( que faltaría mas que no fuese asi ) y cuando quiero. Pero no soy todo lo que escribo ni mucho menos escribo todo lo que soy, ni el cómo ni el porqué.

          Una vez aclarado esto, y a la espera de que la inspiración divina alumbre mi camino, intentaré dar forma a otra entrada, que no se si será nostálgica ( lo siento, soy de esa naturaleza y además, siempre he creido que se escribe mejor estando triste o haciendo un ejercicio de tristeza o mal humor, que asi queda todo mas chisposo, aunque claro, eso me funciona a mi, no me gusta generalizar) o será hipercalórica, pero en ninguno de los casos, me planteo ni el suicidio ni la ingesta indiscriminada de hidratos de carbono.

            Y me voy a seguir con el trabajo, tras mi malhumorada aclaración de este fatídico lunes lluvioso ( y ojo avizor, que me encantan los dias lluviosos, eso de pasear por las calles semidesérticas bajo un amplio paragüas; esos dias en los que uno hace un ejercicio introspectivo para conocerse un poco mejor, esos dias en los que una tarde puede ser única en alguna cafetería con solera, como el Bohemia en mi Granada querida..) lo de fatídico lo digo por lunes, lo que me traslada a otra antigua batalla..aquella de  hacer que las tardes de domingo sean buenas o al menos, dignas! la liga de los Salva-Tardes-De-Domingo se quedó a medias por mi ida, pero volveré...y pronto...ejem...ya ire despejando incógnitas...